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Manolo Prieto (1912 – 1991) –artista, pintor y dibujante como le gustaba presentarse a sí mismo– nació en El Puerto de Santa María (Cádiz) la misma ciudad de origen de su famoso “Toro Osborne” y donde está la Fundación que lleva su nombre.
Ingresó en la Academia de Bellas Artes de Santa Cecilia en su ciudad natal a la edad de 16 años, donde recibió una educación artística en las especialidades de dibujo y figura. En 1930 se traslada a Madrid, donde desarrollara toda su trayectoria profesional. En el año 1932 fue contratado por “Publicitas”, donde coincidió con Emeterio Melendreras, editor más tarde de la revista “Arte Comercial”.
Prieto fue un grafista de amplísima producción y variados registros. Desde 1942 hasta 1956 semana a semana, creo las portada de las novelas de la colección “Novelas y Cuentos” con un estilo cada vez más preciso y sintético. En 1947 empezó a trabajar como director artístico de la agencia de publicidad “Azor”. Fue un extraordinario cartelista, género en el que destacan sus trabajos de tema taurino, así como para diferentes producciones teatrales o para fiestas municipales. Manolo Prieto trabajó también como diseñador de originales publicitarios para prensa, portadas de discos, marcas y envoltorios de productos comerciales.
En mayo de 1957 se coloca la primera valla de carretera con la silueta del “Toro de Osborne” en el kilómetro 55 de la Nacional I de Madrid a Burgos, a partir del dibujo creado por Prieto. El Toro se ha convertido, desde entonces, en uno de los referentes más sólidos y originales de nuestro imaginario colectivo.
También dibujó a lo largo de su vida diferentes carteles para las corridas de la Beneficencia o de la Prensa, donde realizó un trabajo de renovación del género y en el que logró fijar ciertas pautas modernas a pesar de las preferencias estéticas de la época.
Si quieres conocer más de la obra de Manolo Prieto visita la web de su fundación clicando aquí.
1 comentario:
Anterior a Prieto fue el pintor Enrique Mélida. Melida también pintó la silueta de un toro sobre una loma que fue muy famosa en su tiempo. A pesar de ser el pintor de temas taurinos más influyente e importante de la mitad del siglo XX Gélida ha sido rápidamente olvidado. En su cuadro "Se aguó la fiesta" (1876).
Adjunto varias reseñas de diarios del siglo pasado en la que nos hablan de ese importante pintor admirador Goya.
Unas notas de prensa que nos pueden ilustrar lo que estoy diciendo: (ABC. Madrid. El carnaval de Roma. 4 de Febrero de 1923. Martín Ávila)
"Maestro en este arbitrio fue Enrique Gélida. Uno solo de sus cuadros, ¡Se aguó la fiesta!, ha sido en España, y lo es aún, más popular que las Meninas y mucho más que el entierro del señor de Orgaz, y, por lo menos, tanto como la más popular obra mística de Murillo. ¡Se aguó la fiesta! es aquel cuadro en que un bravo toro, retinto en negro y corniapretado, se planta amenazador ante un grupo de chisperos que comen regocijados en pleno campo."
Revista de la Biblioteca Archivo y Museo. Ayuntamiento de Madrid, nº 13. Enero 1927.
Mélida, madrileño, nacido el 6 de abril de 1838, casa con María Bonnat, hermana del retratista francés León, y muere en París el 28 de abril de 1892. Trasladado a Bayona es enterrado en el cementerio de San Esteban en el panteón de la familia de su mujer. Es el autor de "Despacho parroquial", "El esquilador", "La lección de toreo", "La antesala del príncipe de la Paz", "La misa de parida", "Ronda de la Inquisición", "Pórtico de San José en Madrid", "Pobres esperando la hora de la limosna", y su obra más conocida es "¡Se aguó la fiesta!", la merienda campestre interrumpida por la presencia de un toro, cuadro reproducido infinitamente desde las planas de La Lidia hasta los abanicos pericones de las damas de aquel tiempo.
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